El 13 de mayo, la Asociación Musical Min-On ofreció un concierto especial en el Centro Cultural Min-On para celebrar el sexagésimo aniversario de las relaciones diplomáticas formales entre Jamaica y el Japón.
El programa contó con la actuación del tenor Steve Higgins, la soprano Yukari Kiyono y el pianista Mitsuru Hirose, y fue organizado conjuntamente por la Embajada de Jamaica en el Japón y la Agencia Japonesa de Asuntos Culturales (ACA). En el concierto que se llevó a cabo el 15 de mayo, se sumó con su auspicio el gobierno de la prefectura de Tottori.
A la función vespertina asistieron embajadores y enviados diplomáticos de siete embajadas de Tokio, así como unos 110 espectadores. La principal oradora de la velada fue Su Excelencia Shorna-Kay M. Richards, embajadora extraordinaria y plenipotenciaria de Jamaica en el Japón, quien destacó el poder de la música para estrechar lazos y trascender diferencias entre los pueblos y países. Asimismo, describió la música jamaiquina como una expresión del alma humana. El comisionado delegado de ACA, Tetsuo Goda, se mostró feliz de ver que el concierto había aunado a músicos de ambos países, destacando que este tipo de colaboraciones era una oportunidad de promover e incentivar el intercambio bilateral.
En la función vespertina, el señor Higgins interpretó en idioma japonés «Ue Wo Muite Aruko» (más conocido, en Occidente, como «Sukiyaki») y dos canciones tradicionales de Jamaica: «Day-O» y «Coconut Woman». También interpretó «Mento» en el tambor autóctono djembe, para transmitir el ritmo prodigioso de la música jamaiquina a un público que respondió con entusiasmo.
La soprano Kiyono interpretó la popular canción japonesa «Las cuatro estaciones de mi pueblo natal» y, a continuación, «El árbol de baniano», «Todo lo que te pido» y «La hora del adiós», a dúo con el tenor Higgins.
Tanto en el concierto matutino —el 13 de mayo— como en el programa vespertino —el 15, en el Centro Cultural de Tottori-shi—, el primer secretario de la Embajada de Jamaica, Sherdon S. Baugh, ofreció una presentación acompañada de imágenes sobre la nutrida historia cultural de su país, a la vez que enumeró los múltiples intercambios que Jamaica y el Japón han mantenido a lo largo de los años.
Este concierto especial fue posible gracias al aporte de los suscriptores y abonados de la Asociación Musical Min-On, y de otros benefactores que apoyan nuestras diversas iniciativas de extensión comunitaria.